Estas preciosas e inteligentes sillas están diseñadas por Moritz Waldemeyer y tienen la particularidad de que en su respaldo tiene un sistema informático que mediante un sensor RGB que analiza el color de la ropa de la persona que se sienta en ella y proyecta por detrás esos mismos colores.
Por medio de luces de LED colocadas en la parte posterior de la silla, la persona que se sienta en ella emite un personal halo de luz, muy similar a la que vemos en las iconografía religiosa.

Estos respaldo altos traen a la memoria los de las sillas de los reyes antiguos. En ellos se ubican una serie de agujeros en vez de joyas, pero el efecto es muy similar. Los agujeros están dispuesto de tal manera que aumentan suavemente su tamaño, proporcionando la sensación de que la silla se disuelve en el aire.

Es un extraño pero cautivador elemento de decoración, al que no puedes dejar de observar.